martes, 30 de junio de 2009

La bifurcación

Y al final de esa calle, una bifurcación. Te detienes. Piensas. No te decides si ir por la derecha o por la izquierda. Sólo hay dos alternativas. Dos caminos. Dos direcciones. Tratas de ver la infinitud de cada calle. Se ven diferentes. Ves a un lado y vaticinas una historia y del otro lado anticipas otra historia. Y allí las dos calles. Y estás hecho incertidumbre. Cada camino te llevará a un final distinto. Tu vida dependerá de esa decisión. Vuelves a ver las dos calles. Y no sabes qué hacer...

José Roberto Coppola 

22 comentarios:

Dara dijo...

Que
saque
una
moneda
del
bolsillo.



miau grande de sandía :)

Anónimo dijo...

Que difíciles que son aquellas líneas eh. Yo creo que seguiría mi instinto. Aunque muchas veces falla. Entonces iría a la calle contraria de mis pensamientos. Bueno no es segura tampoco. Pues, qué embrollo. Dejemos que los pies decidan.

Un beso.

Natalia Astuácas dijo...

Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhh pues sí... decisiones... decisiones... upaaaaaa por este tiempo me tienen un poco mal las decisiones... alaaaaaaaaaa

Un abrazo amigo, cuidate mcuho, besos.

nadenise dijo...

Te sentás. Te serenás. Te desesperás. Te levantás. Das vueltas en círculo con los ojos cerrados. Y apresuras el paso. Quizás es una derecha. Tal vez una izquierda. O tan sólo el mismo camino que ya recorriste.

Mrs. Brightside dijo...

Por casualidad encontré este blog y antes de esa casualidad tuve que escoger un camino y del que he escogido esta vez no me arrepiento :)
Un beso.

yaliet dijo...

los caminos ya están escritos desde antes de existir :)

Donce dijo...

Y si te sales de los dos caminos y vas de frente? quizá haya alguna puerta donde llamar...

Vanesa dijo...

La historia de mi vida!!....la indecision!! Dios si algo detesto de mi es eso..jamaz e podido tomar decisiones rapidas..siempre lo pienso y lo vuelvo a pensar...Espero que cual se ael camino que escogas te traiga feliciadad...y paz..sobre todo paz...

micamic dijo...

"Donde se penetra por fin el laberinto, se tienen extrañas visiones y, como suele suceder en los laberintos, una vez en él, se pierde la orientación”.


Me hiciste acordar a esta parte de un texto que me dieron a leer hace mucho.
Supongo que vivir, es vivir desorientado.


Muy lindo escrito ^^

Lulutrix dijo...

no se puede hacer forward y después decidir?

Paula Daiana dijo...

Yo tomaría la izquierda pero creo que las mejores respuestas están en uno, a veces es cuestión de saberlas escuchar...
Muy linda la reflexión sobre la incertidumbre!
Besos
Pau

Verònica dijo...

diria que de pronto parece que vivimos en la bifurcaciòn constante...
habrà que guiarse por el instinto, a veces confìo màs en lo que pueda surgir de èl que de las decisiones seguras,

besotes terapeuta!

Vero.

El sereno de los faros dijo...

Dar la orden del instinto a los pies. Si se erra se aprende, no es tan grave.

abrazo

Antonela dijo...

No es fácil elegir. Pero cuenta la leyenda que cuando uno las toma, crece.


Saludos

Antonela

Pulgamamá dijo...

Te entiendo perfectamente pero hasta no tomar una desición es una decisión. Aunque detenerse no puede ser una opción, es mejor equivocarse.
Te adoro

Iván Cárdenes dijo...

Aventúrate, aún marchando por el camino equivocado, aprenderás de él.

Tony Amesty dijo...

Que indecisión, solo dos caminos........¿No hay un camino alternativo?

Un abrazo.

Fernando García-Lima dijo...

A la izquierda. Siempre a la izquierda.

Hisae dijo...

Nunca sabrás que te habría pasado si tomaste la derecha y dejaste la izquierda. Pero eso sí, lo que viviste, fue por arriesgarte.

Un abrazo.

Claudio López Iscafre dijo...

primero, gracias por tu visita y tus palabras en mi blog.Esos dos caminos se me presentaron hace muy poco y tome por uno... aun me pregunto si fue le correcto. El tiempo me lo dira... abrazos

Terapia de piso dijo...

Dara: al bendito azar!
Morella: y de nuevo la incertidumbre.
Natalia: mmm
Na: siempre me desesperaré y me serenaré y me desesperaré en una línea infinita.
Anais: bienvenida.
Yaliet: tú dices?
Donce: quizás, quizás, quizás.
Vanesa: sí, paz.
Micamic: vivo desorientado.
Lulú: te imaginas.
Paula: nunca hay un camino correcto.
Verónica: y a veces no confiamos en nada.
El sereno: eso nos lo inventamos como consuelo. Eso del aprendizaje de los errores.
Antonela: me gusta esa leyenda.
Extranjera: también siempre lo digo. Te adoro.
Iván: que triste conformarse con eso.
Tony: será que no lo veo? será que lo creo yo?
Fernando: siempre?
Hisae: esa será mi única certeza.
Claudio: o quizás nunca necesites saberlo.

Gracias a todos por pasar.

José Roberto Coppola

Nacho Hevia dijo...

nada impide desandar lo erróneo de una decisión...sólo hay que tener el mismo valor que se tuvo al emprenderlo, aunque aveces se tomen decisiones basadas en la inconsciencia...