miércoles, 25 de marzo de 2009

El día en que me robaron el presente

Bajaba por la empinada calle que está frente al apartamento donde vivo. Me dirigía a tomar el autobús que me llevaría al metro y luego al trabajo, y cuando estaba cruzando en la esquina, el futuro se atravesó en mi camino. Me detuvo. Quería arrebatarme el presente. Por unos momentos no puede dar paso alguno. Pero no dejé que me lo quitara, después de mi asombro, me desaté y decidí hacerlo a un lado. Seguí caminando. Opté por no mirar atrás, no quería saber si el futuro me perseguía. Llegué a la parada y vi mi rostro asustado en el reflejo del anuncio publicitario que estaba en la estación. Apareció el autobús, me subí y tomé asiento; cuando arrancó, yo estaba sentado con la vista en la ventana. Una cuadra más adelante me di cuenta que me hacía falta algo, me registré y no lo encontré. El bandido futuro me había robado. Ya no tenía al presente entre mis pertenencias.

José Roberto Coppola

15 comentarios:

Lorena J. Saavedra dijo...

¡¡Oh no!! Policía, atrápelo! Que va a andar haciendo algo la poli... ¡Increíble, me encantó!

Anónimo dijo...

wow...
me dejaste sin palabras...
sin presente no tenemos pasado o no tenemos futuro?? no se , jeje me confundi!

beso!

Juancho!

Lulutrix dijo...

no te preocupes es un trabajo para SuperZen, Superzen al rescate!

Donce dijo...

No es por nada niño, pero escribes muy, pero que muy lindo!

(los miércoles me siento sobre una silla para escuchar horita y media de poesía, y no veas cómo me gusta -y me relaja- uuffff, es todo un placer, casi-casi-tanto como hacer terapias de piso, jeje)

Un besote

Natalia Astuácas dijo...

José buen relato, es como ficción pero a diferencia este me gustó...

Un abrazote, espero estés muy bien, cuidate mucho.

Gonzinko dijo...

Yo creeria que uno sin presente , queda ausente de alguna manera...

Gastón dijo...

Caminante, no hay tiempos...
Se hace presente al andar...

Y las hueñllas el pasado y el horizonte el futuro, y nosotros... andando...

Abrazo presente
(sin ausencias)

HUMO dijo...

Me encanta haberte encontrado, me gusta la forma en que escribes, me gusta leerte y sobre todo comparto la terapia de piso!

=) HUMO

Vanesa dijo...

Como siempre enganchada en tu terapia…y como siempre me dejas pensando y dudando…Un abrazo!

Fernando García-Lima dijo...

Qué gran idea! Buenísima!

Da un juego... Prometo no plagiar, jajaja.

Un abrazo

Anónimo dijo...

Por lo menos te quedaste con tu pasado

Ricardo Rivera Vasallo dijo...

EL pasado rompe el espacio-tiempo de lo racional y lo zafral. Caminando por la calles, me roban el pasado, ¿Por quién pelearía, por el pasado o por el presente?
La esencia está en querer profundizar el presente, para seguir experimentando un pasado mucho más secuencial, y menos presionado por naturaleza.
En fin. Siempre, tanto el pasado como el presente son inmortales o inseparables en las conjeturas de la vida. Es un espacio-tiempo totalmente homogéneo.
Saludos, buen blog.
.

Damian dijo...

Qué buen texto! Genial :)

Un saludo

Mathilde dijo...

excelente!

Terapia de piso dijo...

Lore: A veces es muy tarde.
Juacho: gracias. Un abrazo.
Lulu: me causó risas.
Donce: gracias.
Natalia: pero créeme que no es ficción. Lo viví. Muchas veces no dejamos robar por el tiempo.
Gonziko: por eso no debemos dejar que nos lo arrebaten.
Gastón: el manoseado presente al que muchas veces no le rendimos culto porque está sucediendo. Porque es muy fugaz.
Humo: bienvenida.
Vanesa: no sé si sea bueno el efecto.
Fernando : ¿Qué se te habrá ocurrido?
Galán: que triste es el por lo menos.
Cromosome: su frontera es casi inexistente.
Demián: gracias.
Mathilde: gracias.

Saludados quedan todos.

José Roberto Coppola